Buscando a Nemo
La incestuosa historia real detrás del pez payaso de «Buscando a Nemo»
Nemo es un pez anaranjado y blanco que pertenece a la familia de los peces payasos (Amphiprion ocellaris). La piel de estos animales está compuesta por una capa de moco que les protege del veneno de las anémonas.
El hábitat natural de los peces payasos se encuentra en la Gran Barrera de Coral australiana y en el mar Rojo. Desde el punto de vista sexual son animales hermafroditas con ciertas peculiaridades.
La biología define como hermafrodita a todo ser vivo que posee órganos reproductores masculinos y femeninos, una situación que es frecuente entre plantas e invertebrados, pero inusual dentro de los vertebrados.
En el año 2003 se estrenó «Buscando a Nemo», un éxito de taquilla que recaudó más de novecientos cuarenta millones de dólares. El argumento comienza con la muerte de Coral -una hembra de pez payaso- a manos de una barracuda.
El depredador también acaba con la vida de sus cuatrocientos huevos, bueno de todos no, se salva uno, del que nace Nemo. Después de un encuentro desafortunado con unos humanos, este pez desaparece y su padre Marlin y un pez cirujano regal (Paracanthurus hepatus) llamado Dory emprenden su búsqueda.
Si este argumento hubiera caído en manos de un científico habría sufrido notables variaciones, por una parte habría dejado al descompuesto Marlin durante dos semanas confuso y desolado viviendo al abrigo de las anémonas. Pasado ese tiempo habría adquirido el rol de pez payaso hembra, ya que, como hemos visto, estos peces son hermafroditas.
En los peces payasos se producen modificaciones genéticas y cambios neuronales que transforman los testículos en ovarios.
A medida que el cambio de sexo progresa las células se reprograman, borran las marcas masculinas y promueven las femeninas. Esta curiosa transformación asegura la supervivencia de la especie.
Pero aquí no quedaría todo, cuando el pobre Nemo hubiera asumido que tiene una nueva mamá no tendría más remedio que adquirir el papel dejado por su padre, transformándose en la pareja de Marlin, con el cual acabaría teniendo una nueva y numerosa prole.
Ahora bien, ¿cómo habrían asimilado este argumento los más pequeños de la casa? Quizás será mejor dejar el guion como está... aunque sea biológicamente incorrecto.